sábado, 15 de mayo de 2010

15/V/2010. La Voz de Galicia. Universidad sin política


Universidad sin política

Por Arturo Maneiro 

Quizás se podría asegurar que una de las reformas educativas más importantes que necesita España es la despolitización de las universidades. Su carácter de instituciones autónomas solo se puede garantizar con rectores independientes, que no sean representantes de tendencia política o grupo de presión de marcado carácter político. Por eso, los Gobiernos y los partidos políticos no deben tener correas de transmisión en los órganos rectores de la enseñanza superior. Es lógico que las personas tengan sus simpatías o tendencias políticas, pero deben mantener su independencia por encima de todo.

En estos momentos en que las universidades de Galicia viven procesos electorales, se hace mucho más necesaria la autonomía en su administración y organización; se hace imprescindible la aplicación de criterios profesionales, no políticos. En momentos de crisis económicas es vital que sus presupuestos se administren con eficacia y rigor. Y como los criterios profesionales, la eficacia y el rigor no se llevan bien con los criterios políticos, es fundamental dejar de lado la política que busca el poder.

Las elecciones universitarias deberían ser un ejemplo para el resto de la sociedad por elegirse en ellas a las personas con el perfil más adecuado a las necesidades de gobierno de estas instituciones. No sería propio del espíritu universitario dar el voto a una persona solo por afinidad política, y menos por imperativo de partido o por estrategia de poder. Tampoco sería propio de un entorno de estudio, análisis, rigor y dominio de la razón, como se le supone a la universidad, dar el voto por imagen, por simpatía, por desconocimiento, por no quedar mal, o incluso apoyar a un candidato determinado por la presión del grupo, de la plataforma. E incluso me atrevería a decir que ni por la oferta ventajosa para un grupo, para una facultad o para un sector, si tal oferta no es razonable.

Sería un gran ejemplo para otras muchas instituciones que el entorno universitario se caracterizase de verdad por votar con la cabeza y no solo con el corazón. Eso espera mucha gente y eso debería ser el objetivo de profesores y alumnos de las universidades de Galicia.